viernes, 22 de septiembre de 2023

 

Mario. El tipo que supo




por Alberto Carbone

 

La infausta noticia referida a la pérdida de uno de los periodistas más destacados en el ambiente político nacional sobrevuela aquella impiadosa sensación determinista que dimensiona un desgraciado sino en la Argentina.

Aquel que dice que los buenos, los imprescindibles, nos abandonan pronto.

Es cierto que todavía quedan voces de elevado valor capaces de descifrar y ayudar a entender nuestra problemática situación social, económica y política, pero también es verdad que giran, conviven y hacen su agosto alrededor de estos temas, desafortunados pseudo periodistas que por migajas algunos o por cuantiosos emolumentos otros, aplican su palabra una y otra vez a satisfacer las conveniencias de quienes les abonan.

Mario Wainfeld no era de esa calaña.

A los setenta y cuatro años de edad continuaba contribuyendo con su locuacidad e inteligencia a mejorar la interpretación de la realidad contemporánea, alejado de intereses particulares y aportando su valioso análisis para comprender nuestro incesante devenir.

Él supo bien qué lugar debía ocupar el periodismo de investigación.

Su aguda observación política surgida de su profunda sinceridad y de su ponderación  objetiva se radicó definitivamente en la vereda opuesta de la obsecuencia e interés pecuniario de los grandes Medios que concentran aún el patrimonio de la rentabilidad.

Todavía quedan algunos periodistas que demuestran ser auténticos escritores como Mario.


Mario Wainfeld


Su desenvolvimiento profesional es de prever se multiplique entre los jóvenes quienes se están formando, para que se sientan capaces de seguir andando tras sus pasos.

Su huella imborrable deseamos marque el camino.