El poder de la Rebelión

o la Rebelión de los Poderosos.

 

por Alberto Carbone

 

Buenos Aires es un gigante productor que sintetiza los ingresos de todo el país.

Por eso mismo debe aportar el cuarenta por ciento a la Nación y recibe como

contraparte el veinticinco.

La política de redistribución así lo determina, obligando a las regiones con más

ingreso que coparticipen una porción mayor equilibrando la balanza redistributiva.

Pero el gobierno Peloduro abolió la redistribución.

En consecuencia sería lógico y necesario que las provincias NO envíen sus dineros a Nación.

Estimo que si el gobernador Kicillof determina esto que digo, resolvería fácilmente

los gastos e inversiones de su región.

Ya que hablamos de rebeldía, cumplámosla juntos.

Además, por otra parte me pregunto y le pregunto a usted:

¿Qué brindará el Estado al país en el futuro próximo si el Peloduro va a privatizar todo?.

En consecuencia estimo necesario que pensemos en la posibilidad de dejar de abonar los impuestos nacionales y esperar los importes que efectuarán las compañías privadas.

Un gobierno gobernado por adolescentes estúpidos no merece otra cosa.

Lejos, muy lejos quedó aquella juventud que desaparecieron con el dinero de los que hoy bancan al Peloduro.

¿Y nosotros?. Qué le parece. Aquí estamos.

Miramos a nuestro alrededor y no podemos creer el grado de ignorancia.

Por eso nos atenemos a repetir las palabras del genio de Lepanto que en su Quijote observara:

"Cosas Veredes Sancho que non Saperes"